El retiro de la visa estadounidense a Marina del Pilar, gobernadora de Baja California, y a su esposo ha encendido las alarmas en la política mexicana. El exembajador de México en Estados Unidos, Miguel Basáñez, advirtió que esta medida refleja una postura cada vez más hostil por parte del gobierno de Donald Trump hacia México, especialmente en temas relacionados con el combate al crimen organizado y la seguridad en la frontera. Aunque aún no hay una acusación formal contra la gobernadora, la inclusión en lo que parece ser una “lista negra” causa gran preocupación.
Adolfo Laborde, director del área internacional del CIDE, analizó las implicaciones diplomáticas de este retiro de visa, señalando que marca un deterioro preocupante en la relación bilateral. En un momento de alta tensión, donde los cruces diplomáticos entre México y Estados Unidos aumentan, este tipo de decisiones podrían escalar hacia conflictos mayores si no se manejan con cautela y claridad por ambas naciones.
