En la fase de El Riego, fechada entre 7000 y 5000 a.C. se encontraron restos de chile. Mac Neish (1967:292) especula que puede haber sido el primer cultivo domesticado en Mesoamérica. El fruto recuperado de la cueva de Coxcatlán, S. L. P., de un nivel estratigráfico fechado entre 5000 y 3500 años a.C., representa un chile domesticado, En Ocampo, en el estado de Tamaulipas se hallaron restos de chile tan antiguos como los del otro sitio, por lo que se piensa que fue otro centro de domesticación.  

   El chile se utilizó como tributo entre los aztecas. La nómina más conocida es la Matrícula de Tributos, que forma parte del Códice Mendocino (nombrado por el virrey Mendoza). En ellos se denomina al chile como ají o axí, palabra de origen arahuaco. 

   Hoy tenemos datos más científicos acerca de la capsicina, el elemento que confiere picor al chile, y su valor comprobado como medicamento ha formado parte de las curaciones de enfermedades culturales, como el “mal de ojo”, para efectuar una “limpia”, y otras más. Investigaciones médicas recientes comprueban su efectividad al utilizarlo como anestésico, y su gran valor por las vitaminas que aporta. Hoy sabemos que 100 grs. de chile poblano contienen 24.64 mg. de vitamina C, y que los chiles dulces contienen aún niveles más altos (Morales Reséndiz 1980:30). Con sólo 10 mg. diarios de esta vitamina se puede evitar el escorbuto.

   Se caracteriza popularmente el Capsicum por ser un condimento picante. Este factor está determinado por la cantidad de capsicina (C18 H27 NO3) en el fruto, que se encuentra principalmente en la placenta del chile. La capsicina está controlada por un gene dominante, del que carecen los chiles dulces como el pimiento morrón. Los pequeños suelen ser los más picosos.

   Las especies domesticadas evolucionaron de diferentes especies espontáneas. Los pájaros deben haber tenido un papel importante, ya que pueden retener semillas en el sistema digestivo por 14 días sin destruir la fertilidad de las mismas. Casi todos los chiles cultivados en México pertenecen a la variedad annuum, que es una planta anual, la que, sin embargo, suele crecer como perenne en zonas tropicales.  El chile es de la mayor importancia en el mundo y el de distribución geográfica más amplia. Forma parte de la comida básica y hay más variedades de chiles cultivados en México que en cualquier otro país.

   El chile habanero o Capsicum chinense tiene su origen en la cuenca amazónica y se conoce en México con el nombre popular de “chile habanero”. 

   Pedro Mártir, en su carta CXXXIII dio la noticia en Europa del descubrimiento en América de una especie nueva, presentada en la corte de Barcelona, a los Reyes Católicos en mayo de 1493: “…Durante el siglo XVI, principalmente los españoles, portugueses, ingleses, holandeses y turcos se encargaron de la difusión de las plantas americanas”.

LEYENDAS HISTÓRICA

1) En la época del rey Huémac, último soberano de los toltecas, se dice que tenía una hija muy hermosa que, por ello fue codiciada y deseada por muchos pretendientes. Un día se presentó en el tianguis o mercado de Tula un vendedor itinerante de chiles de origen huasteco, totalmente desnudo, como era la costumbre de su país. La hija del rey lo vio con toda su desnudez, y comenzó a enfermarse del antojo, y por amor de “aquello que vio” se le hinchó todo el cuerpo y se puso muy enferma. Cuando el rey Huémac preguntó por su hija le informaron que estaba “mala de amores”. Mandaron a buscar al vendedor y lo encontraron sentado en el mercado, nuevamente vendiendo chiles. Huémac le reclamó no llevara maxtlatl para cubrirse y el chilero respondió que así era la costumbre de su tierra. El soberano entonces, le insistió: “vos antojasteis a mi hija, vos la habéis de sanar”. Después, el vendedor se convirtió en yerno del rey.  Los toltecas, que habían deseado a la bella princesa, no estaban de acuerdo que se casara con un humilde vendedor de chile y protestaron ante el rey, quien, a su vez, decidió mandarlo a la guerra para que ahí lo mataran. Como lo habían previsto, durante la batalla los toltecas lo dejaron solo ante el enemigo y huyeron para avisarle a Huémac, quien pensó que había muerto y se alegró mucho, ya que se avergonzaba de tener un yerno de ese nivel. Pero el chilero salió victorioso y dio muerte a muchos enemigos, por lo que al enterarse Huémac se atemorizó y mandó preparar la fiesta de la victoria que se hacía a los guerreros triunfantes. En realidad, no se trataba de un simple vendedor itinerante de chiles sino del dios Titlacauan (Tezcatlipoca), quien había engañado a los toltecas, como en otras ocasiones (Sahagún 1982: 197-199).

2) Se utilizó el chile como arma defensiva, según nos refiere en su Crónica Mexicana Alvarado Tezozómoc (1944). Relata que Moctezuma Xocoyotzin llamó al teucunenenque y le ordenó ir, con otros señores principales, a los pueblos del golfo de Ahuilizapan y Cuetlaxtlan a colectar tributo. A su llegada fueron atacados, ahogados con humo de chile, destripados, rellenos de paja, sentados en elegantes bancos e insultados por sus atacantes (Chapman 1971:124)

3) Además de su utilización como condimentos y producto tributario, en ocasiones, el chile funcionaba como arma o instrumento correctivo. El Códice Mendocino contiene una ilustración de un padre castigando a su hijo de once años, forzándole a inhalar el humo de una fogata de chiles secos. Este método de sanción todavía se practica entre los popoloca del sur de Puebla.

4) El chile se utilizó como tributo entre los aztecas. Se pagaba en las siguientes medidas: en grano o por cargas (lo que podía cargar un tameme o cargador), en cestos, cajetes, tenaces, chiquihuites, petates o por sementeras. Cada pueblo-cabecera tenía una casa llamada calpixcacalli o texancalli, donde se almacenaba el tributo. El lote destinado a Techochtitlán era depositado en el petlacalli o bodega imperial del soberano, de donde, en tiempos de escasez, se distribuía la comida entre los necesitados. A su llegada, los españoles adoptaron, en los primeros años, el sistema indígena de tributación con pocas modificaciones.

   Hubo dos rutas de difusión al Oriente en el S. XVI, la del comercio entre Acapulco y las Filipinas y el de América a Europa y de ahí al Oriente. De Nueva España a Filipinas desde mediados del siglo XVI, fueron llevadas a China, Japón, Indonesia, Formosa y el sureste de Asia (O’Brien 1972:348). Parece que Portugal lo introdujo en la India en el siglo XVI. El chile cultivado en la India no es de la especie de origen brasileño, (Capsicum chinense), sino de la mexicana (Capsicum annuum), y se le conoce con el nombre común de chilli, palabra de origen náhuatl.  

   Se introdujo a EE. UU. después de la llegada de los españoles al suroeste a fines del siglo XVI. En Europa tuvo aceptación general hasta el siglo XVIII. Después de su llegada a Europa se difundió rápidamente en otros países. Aun hoy en día, la cocina mediterránea muestra la influencia de este injerto cultural. Todos los países que circundan el Mediterráneo, desde Portugal hasta Yugoslavia, incluyen en su menú tradicional una ensalada compuesta de rajas de chile pimentón (Capsicum annuum, var. annuum) y jitomate. En el sur de Francia, el rouille, que significa “color de óxido”, acompaña a la bouillabaise y a otras sopas de pescado populares. El platillo típico de los Maghreb, de Marruecos, Túnez y Argelia, es el alkuzkuz, acompañado con un aderezo picante llamado harissa, hecho de chile y jengibre.

   Llegó a Hungría con el nombre de vörös Törökbörs o “pimienta turca roja”. Hoy se lo conoce como páprikas, una variación de la palabra búlgara piperka, que es una adaptación del latín piper o “pimienta negra” (Livingston 1980-40-46). Pertenece a la especie Capsicum annuum, de domesticación mexicana. Sin embargo, no se sabe cómo llegó a manos turcas después de su introducción a España. Tal vez por contacto con los españoles en el Mediterráneo u otros comerciantes, o bien por la emigración de los moros y judíos expulsados de España que se establecieron en Turquía.  

   En Africa, muchos de sus cultivos más importantes son americanos, incluyendo el chile. Llegaron a Mozambique y Angola, en la costa oriental del África, en la ruta de las especias. 

EL USO DEL CAPSICUM EN LA MEDICINA TRADICIONAL 

La tos, el oído infectado, heridas en la lengua, y en los dientes. 

USO CONTEMPORÁNEO EN LA MEDICINA POPULAR: reumatismo, lumbago, el nervio ciático, la gota atónica y la neuralgia rubifaciente, Para fomentar las erupciones de viruela, escarlatina y sarampión. En los países árabes le atribuyen cualidades afrodisíacas. En Samoa el chile es uno de los ingredientes del kava, pócima del amor y la virilidad. Las mujeres africanas se bañan en agua enchilada para aumentar sus atractivos sexuales. para tratar ataques cardiacos, aliviar la presión arterial y para el crecimiento del cabello. Los tarahumaras usan una infusión de chile y sus hojas para la bronquitis, asma y garganta irritada, y para eliminar las lombrices.

   Se dice que Moctezuma, al saber de la llegada de los españoles, lamentó su suerte con estas palabras: “¿Qué sucederá con nosotros? ¿Quién de veras queda en pie? ¡Ah, en otro tiempo yo fui!… ¡Vulnerado de muerte está mi corazón! ¡Cuál si estuviera sumergido en chile, mucho se angustia, mucho arde!… ¿A dónde, pues, nuestro señor?” (León-Portilla 1961:30)