Antecedentes de los viajes de descubrimiento

De los viajes emprendidos por los europeos a tierras continentales desde 1517, en el que participaron Francisco Hernández y Juan de Grijalva, conocieron Yucatán y otras regiones costeras, se creó fama de estas nuevas y ricas tierras. Teniendo estas noticias de lo recién descubierto, el rico gobernador de Cuba, Diego Velázquez, organizó una armada para realizar su propio viaje de descubrimiento en 1518, con Juan de Grijalva como capitán general, y los pilotos Alonso Dávila, Pedro de Alvarado y Francisco de Montejo; dentro de los tripulantes iba Hernán Cortés encargado de explorar y comerciar con los indígenas.

Durante dicha empresa, llegaron a las playas de Chalchicueyacan, encontrando en una isla, actos de sacrificio en honor de Tezcatlipoca, la ahora conocida como Isla de Sacrificios, frente al actual puerto de Veracruz; sin embargo, Grijalva no tenía autorización para poblar, por lo que solo se acordó que fueran adelante descubriendo toda la costa, pasando por las sierras de Tuxpan, viendo en las costas muchas poblaciones tierra adentro dos o tres leguas en la provincia de Pánuco, llegando hasta el bautizado como río de Canoas (río Pánuco), donde tuvieron su primer encuentro con los pobladores huastecos, quienes a bordo de grandes canoas, con arcos, flechas y lanzas, atacaron un navío y cortaron una amarra con sus hachas de cobre (figura 1). Al repeler el ataque los extranjeros, los huastecos se retiraron en sus canoas por donde llegaron, continuando entonces el avance de los pilotos hasta una gran península con fuertes corrientes, lugar al que había llegado antes Juan de Grijalva y que hizo regresar a los exploradores a las costas sureñas del Golfo de México (Díaz del Castillo, 1976: 27).

Figura 1. Rivera del Pánuco. Río de las Canoas. Jan Karel Donatus Van Beecq (1638-1722)- Ilustraciones de Hiostoire de la conquête du Mexique ou de la Nouvelle Espagne (Gallica- BNF).

La llegada de los españoles en 1519 y reconocimiento del Pánuco

De acuerdo a la famosa obra narrativa de Bernal Díaz del Castillo sobre el proceso histórico que modificó el rumbo de Mesoamérica y áreas vecinas, publicada como Historia Verdadera de la Conquista de La Nueva España, después de la llegada de los españoles a las costas en 1519, donde fundó la Villa Rica de la Veracruz, de fondear sus naves en las playas de Chalchicueyecan y de despachar a dos mensajeros para México para establecer contacto con Moctezuma I, Hernán Cortés mandó dos navíos a descubrir la costa adelante, al norte, para encontrar un puerto seguro, teniendo como capitán a Francisco de Montejo, y como pilotos a Antón de Alaminos y a Juan Álvarez, llegando a un río grande, cerca de Pánuco.

Estando los españoles en Quiahuiztlan, llegó el cacique gordo de Cempoala con su embajada, diciendo que no habían ido antes hasta saber quiénes eran. Poniendo al tanto de la situación que tenían, se quejaron de Moctezuma por el tributo exigido, además de los hijos e hijas que debían darles para el sacrificio y del trabajo en sus campos los más de treinta pueblos de habla totonaca, a lo que Cortés les consuela diciendo que él les quitaría esas obligaciones. Justamente en ese momento llegaron cinco recaudadores al pueblo, dándoles atenciones y comida. Los recaudadores los reprendieron por haber recibido a los extranjeros sin el consentimiento de Moctezuma. Aconsejados por los españoles, éstos totonacas los apresaron y obedecieron el consejo que no les dieran más tributos ni obediencia a Moctezuma y que lo mismo hicieran otros pueblos. Con este antecedente, más de 30 pueblos revelados no pagaron los tributos exigidos.

Moctezuma

Los de Tuxpan que eran amigos de los de Cempoala, tampoco entregaron los tributos y fueron amenazados por los calpixques mexicas de que les quemarían sus pueblos y hacerlos cautivos, quejándose con Juan de Escalante, capitán y alguacil de la Villa Rica en ausencia de Cortés, quien convocó a traer sus armas de guerra a alrededor de dos mil totonacas, algunos provenientes de la sierra (Díaz del Castillo, op. cit: 180-181). Fueron hasta la guarnición en la “raya de Pánuco” que tenía Moctezuma, ubicada entre lo que bautizaron como Almería -la actual Nautla- y Tuxpan, en la costa norte, para hacer la guerra, y en la primera refriega los totonacos huyeron, dejando a Escalante y sus hombres peleando con los mexicas. Los españoles fueron heridos y llegaron hasta Almería, regresando en malas condiciones a la Villa Rica donde finalmente murieron.

Cortés proclamó su autonomía al establecer el cabildo de la Villa Rica de la Vera Cruz, a pesar de tener la orden de regresar, desobedeció al ver la riqueza, sobre todo el oro conseguido de manos de los pobladores de las costas no sólo de Veracruz y deseando conocer Culúa, donde le dijeron que había más oro, no regresó a la isla y emprendió la marcha hacia Tenochtitlan donde consiguieron más tesoros con los cuales convencerían al rey de España para legitimar el gobierno de las nuevas tierras y quedar fuera del control de Diego Velázquez (Brokmann, s/f).
La fama de dichas expediciones se esparció rápidamente; ese mismo año de 1519, Francisco de Garay, gobernador de Jamaica, organizó la primera expedición propia para ir al continente al mando de Alonso Álvarez de Pineda, quien había participado en las expediciones anteriores de 1517 y 1518, cartografiando toda la costa del golfo, desde la Península de Yucatán hasta la desembocadura del río Pánuco. En esta nueva empresa tuvo por objetivo de explorar y cartografiar la costa entre la Florida (Amichel) hasta el sur del Golfo, en busca de un paso entre los dos océanos, por lo que los intereses de Cortés y de Garay se cruzaron con los suyos en esta región de Pánuco, “una de las más complejas y difíciles de someter” (Macías Domínguez, s/f).

En los ocho o nueve meses de su travesía en cuatro navíos, recorrieron la Florida (Amichel), bajaron al río Pánuco en cuyas cercanías obtuvieron algo de oro y llegando finalmente a Veracruz en agosto de 1519.

Díaz del Castillo | Lapham's Quarterly
Bernal Díaz del Castillo

Según el relato de Bernal Díaz del Castillo, llegaron cuatro personajes a tomar posesión de una parte de esa tierra en nombre de Francisco de Garay, Gobernador de Jamaica, quien había mandado con anticipación al capitán Álvarez de Pineda, el cual ya estaba viviendo en la zona el río Panuco. Con ese antecedente, y aprovechando las relaciones en la Corte, Garay podía pedir al rey se le otorgara desde el río San Pedro y San Pablo (río Tecolutla) todo lo que descubriese por la banda del norte, para ser adelantado y gobernador desde ese río al norte y que se encontrarían con dicho capitán en Pánuco, a setenta leguas de ahí. Algunos fueron apresados por Escalante, encargado de la Villa Rica; sin embargo, al ser comunicado Cortés del arribo de la flota, regresó a Veracruz para conocer que eran parte de la expedición de Garay y que le llevaban documentos donde le exigían compartir entre México y él (Íbid).

Con engaños, Cortés incorporó a dichos tripulantes a sus filas, pero no a Álvarez de Pineda, quien ya lo conocía de tiempo atrás. Este enviado de Garay, escapó de Cortés, rumbo al norte, volviendo a recorrer la costa hasta el río Bravo en sentido contrario, recorriendo el litoral, pasó después por la desembocadura del río Mississippi al que llamó río del Espíritu Santo, entrando en la bahía de Corpus Christi donde fundó una ciudad y continuó hasta el río Bravo al que llamó de las Palmas, y de ahí a Jamaica. Con esto, completó la cartografía desde Yucatán hasta la Florida, siendo el primer mapa de toda la costa (figura 2).

Fig, 2. Mapa de la costa del golfo, 1519. Alonso Álvarez de Pineda. Tomado de Pinzón Ríos

Álvarez de Pineda poco después regresa a la región de Pánuco para establecer una colonia cerca de lo que a la postre sería la ciudad de Tampico (González Hernández, Cristina, s/f).

En 1520, Garay arma una nueva flota y zarpa con la meta de fundar una colonia y una fortaleza en Pánuco, teniendo de nuevo al frente a Álvarez de Pineda con tres navíos, 150 hombres, 7 caballos, armas y cañones. “La colonia comenzó a levantarse, pero los abusos de los españoles provocaron el ataque de los indios, seguramente huastecos, derrotándolos y obligándolos a retirarse, infortunadamente uno de los navíos se hundió, muriendo ahogado Álvarez de Pineda y sus hombres, logrando sobrevivir alrededor de 60 quienes regresaron a la Villa Rica con el capitán Diego de Camargo, dijeron que los indios de Pánuco habían matado a Álvarez de Pineda, así como a todos sus soldados y caballos, y habían quemado los navíos. Finalmente se unieron a Cortés y participaron en la batalla final contra Tenochtitlan.

Garay insistió y mandó dos barcos en auxilio de Álvarez de Pineda con Miguel Díaz de Auza cargo, quien relevaría a Álvarez, y a Francisco Ramírez el Viejo. Llegaron a Pánuco sin encontrar a nadie, siendo también atacado por los indios, regresaron a la Villa Rica, agregando su gente y recursos a las filas de Cortés.

Después de la llegada de Pánfilo de Narváez en 1520, enviado por Diego Velázquez para impedir los planes de Cortés, ambos acordaron enviar a Juan Velázquez de León con ciento veinte soldados a poblar la zona del río Pánuco, y dos navíos para continuar el descubrimiento de la costa adelante, al norte; sin embargo, esta no se realizó por la rebelión en México Tenochtitlan.

Juan de Grijalva

Tras la toma y caída de Tenochtitlan en 1521, muchos de los personajes que intervinieron directamente en el proceso de conquista, no se quedaron a vivir en la ciudad de México, ya que, en palabras del mismo Bernal Díaz, quisieron ir a aquellas regiones más ricas que vieron en los libros de renta de Moctezuma, -seguramente la Matrícula de Tributos y el Códice Mendoza-, que tributaban oro -pensando que había minas-, así como cacao y ropa de mantas de algodón; a diferencia de los pueblos alrededor de México, que les parecían pobres porque solo tenían maíz y magueyes donde sacaban el vino. Cortés mandó a sus capitanes a poblar las regiones que convenían, incluyendo a un tal Castañeda y a Vicente López que fuesen a conquistar la provincia de Pánuco (Díaz del Castillo, op. cit: 377).

A pesar de los fracasos de Garay, consiguió en 1521 una real cédula que le autorizaba colonizar la provincia de Amichel que abarcaba desde la actual Pensacola (Florida) hasta cerca de lo que hoy es Tampico (Macías Domínguez, s/f).

Marcha de Cortés a la provincia de Pánuco

Estando Cortés residiendo en Coyoacán, le llegaron cartas de Pánuco con la noticia que toda la provincia estaba levantada y que los guastecos (sic), eran guerreros muy belicosos; mataron a muchos soldados de los que habían mandado a poblar, solicitando les mandara el mayor apoyo. Como sus capitanes ya se habían marchado a conquistar diferentes regiones de interés, Cortés mismo fue en su auxilio, acompañado y respaldado por todos los soldados que pudo, tanto de a caballo, ballesteros y escopeteros, así como los que venían con el veedor Tapia, los que habían acompañado a Lucas Vazquez a la Florida y otros que habían venido de las islas; según las cifras plasmadas por Díaz del Castillo, 130 a caballo, 250 soldados con todo, ballestero y escopeteros y 10 mil mexicanos (Díaz del Castillo, op. cit: 381-382).

Cortés tenía noticia que Don Francisco de Garay iba a poblarla, ya que el rey le había dado la Gobernación. Los indios de la provincia de Pánuco habían desbaratado los navíos que le envió adelante, lo hizo Cortés para que si iba Garay iba, ya lo encontrara poblado.

Sobre la ruta que pudo haber seguido Cortés, Toussaint, (1948:20) apunta que el camino que quizá siguió desde el Valle de México hasta Pánuco pudo ser la que sigue el río Moctezuma que después se convierte en el Pánuco, ya que desagua el Valle de México; este camino entra en la Huasteca por Tamazunchale.

Sin embargo, en opinión de Gutiérrez Mendoza, lo sugerido por Toussaint y otros antes que él como Chipman (1967) y Blas Rodríguez (1942) argumentando que “no existe ningún documento colonial que haga mención acerca del itinerario seguido por Cortés, por lo que para llegar a la Huaxteca pudo haber tomado cualquier ruta, incluyendo la más corta que corre por Zacualtipan, Molango, Huejutla-Tempoal-Pánuco y continúa más ampliamanete: “para cualquiera que conozca el terreno, que Cortés ni nadie hubiera podido seguir el curso del río Moctezuma para llegar a Tamazunchale, ya que este se encañona profundamente (con paredes verticales de más de 200 m de altura) en la unión de los ríos San Juan y Tula. Debido a lo cual el camino a Tamazunchale siempre ha seguido el derrotero Zimapan-Jacala…” (Gutiérrez, 1996; 111), Según Toussaint (1948: 72) el río Canoas es el Tamesí.

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A la llegada de Cortés con todo su ejército, en la provincia de Pánuco seguían en guerra, por lo que mandó a llamar paz y tuvo muchas luchas, matando a tres soldados e hiriendo a más de 30, 4 caballos muertos y muchos más heridos, así como también cobró la vida de 200 mexicanos y otros 300 quedaron heridos a manos de los huastecas, según este relato, eran sobre 50 mil hombres, muchos de ellos murieron en el campo de batalla, no volviendo a juntarse para dar guerra (ratificando uno de los rasgos culturales huastecos ya mencionados por otras fuentes era que, a pesar de ser entidades políticas autónomas, se podían reunir para la guerra ante un enemigo común).

El relato detalla que Cortés estuvo ocho días en un pueblo cuyo nombre no aparece, quedó un espacio en blanco en el original, pero si menciona que había muchos bastimentos, es decir, abundancia de productos para subsistir.

De los caciques capturados en batalla, mandó a llamar a 10 para que intervinieran con los demás gobernantes locales de la región, amenazándolos para doblegarse, logrando su propósito. Cortés con la mitad de su ejército se fue al río Chila que estaba a 5 leguas del mar y volvió a mandar mensajeros a todos los pueblos del otro lado del río para que se rindiesen también. Menciona que era una tierra con tres grandes lagunas y ríos, como una gran fortaleza. Menciona que varios pueblos se encontraron abandonados y allí aprovecharon para dormir, en uno de ellos encontraron las cabezas de los soldados y capitán que mandó Garay para poblar dos años atrás. En uno de los enfrentamientos, ya casi vencidos, se volvieron a reorganizar tres veces para dar batalla, cosa admirada por Díaz del Castillo. Finalmente después de varios enfrentamientos sucumbieron en batalla pero dice que entraron a un gran pueblo cuyo nombre no mencionan pero que era muy fuerte que estaba junto a una laguna, por sus Ciénegas y río.

La fundación de la villa

Díaz del Castillo dice que mandó a poblar una villa con 120 vecinos, entre los cuales dejó 27 de a caballo y 36 escopeteros y ballesteros, todos juntos son 120 y la llamaron Santiestéban del Puerto, a una legua de Chila. Se trató pues de un pueblo existente pero abandonado por las continuas luchas, repartiendo entre su gente todas las tierras de los pueblos que se rindieron, dejando por capitán y teniente de ellos a Pedro de Vallejo.

Pánuco y su casona histórica - Identidad Veracruz

La fundación de la Villa de Santiesteban del Puerto que a la postre se llamó Pánuco, obedeció a las necesidades políticas de Hernán Cortés de tener una ciudad fundada por él mismo en la costa norte del territorio recién descubierto. En la carrera militar ante la corona, Cortés debía demostrar a la Corona que tenía posesiones y haber emplazado una ciudad con habitantes españoles.

El papel que ha desempeñado Pánuco para la historia ha sido preponderante.
A la llegada de los españoles a las costas de Chalchicueyacan y tras no ser recibidos por Moctezuma Ilhuicamina, partieron hacia el norte a bordo de sus naves costeando a todo lo largo de lo que actualmente corresponde a las costas del estado de Veracruz. Uno de los primeros episodios más reveladores sobre las poblaciones autóctonas.

Los españoles al mando de …. Llegaron al río de las Palmas; se sorprendieron al ver la gran cantidad de casas y pobladores en sus riveras.

Esta gran densidad de población ha sido confirmada por la arqueología. Los asentamientos que han sido registradas en los márgenes del río Pánuco atestiguan que este río ha sido testigo y proveedor para la subsistencia desde tiempos precerámicos.

El sitio arqueológico de Pánuco

Pánuco es uno de los sitios arqueológicos más importantes de la Huasteca. Su investigación pionera por parte de Gordon F. Ekholm sentó las bases para el establecimiento de la primera secuencia cultural de la región huasteca, especialmente para la cuenca baja del río Pánuco.
Sin embargo, antes de Ekholm, el poblador local, señor Roberto Pavón, gustaba de coleccionar piezas arqueológicas provenientes de los alrededores.

Sala Arqueológica | Museo de Guasave
Gordon Frederick Ekholm

Uno de los principales asentamientos se ubicó en lo que más tarde sería la ciudad de Pánuco, perteneciente al Estado de Veracruz.

La arqueología de Pánuco se da a conocer por uno de los pioneros en la investigación de la Huasteca, especialmente de esta región, el señor Roberto Pavón, con el hallazgo de materiales arqueológicos al realizar obras constructivas en el patio de su casa.
En estos trabajos pioneros con una alta capacidad de observación, detecta la estratigrafía…

Conclusiones

A lo largo de la primera parte de antecedentes queda claro que se realizaron grandes esfuerzos por poder conquistar la llamada provincia de Pánuco.


Artículos publicados en la Revista Praxis, Edición Conmemorativa por los 500 años de Pánuco, promovida por la Secretaria de Gobierno de Veracruz.

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Dra. María Eugenia Maldonado Vite
Licenciada en Antropología, especialidad en Arqueología por la Facultad de Antropología. Universidad Veracruzana. Xalapa Ver. | Maestra en Arqueología por la Escuela Nacional de Antropología e Historia. México, D.F. Mención Honorífica con recomendación para publicación. | Doctora en Arqueología División de Posgrado. Línea de investigación Sociedades Complejas. Escuela Nacional de Antropología e Historia. México, DF con Mención honorífica con recomendación para publicación. | Docente de la Facultad de Antropología de la Universidad Veracruzana, impartiendo la materia “Técnicas de Investigación Documental”. Agosto 1997 a febrero 1998. •Tutora en el programa de doctorado del Posgrado en Estudios Mesoamericanos de la UNAM •Desde 2009 Profesora Investigadora de base Titular A, adscrita al Centro INAH Veracruz. •Más de una decena de proyectos de investigación arqueológica en el sur de la Huasteca veracruzana derivados de obras de infraestructura petrolera, carretera, eléctrica, portuaria y social. •2010 Proyecto Arqueológico Sur de la Huasteca Veracruzana. Centro INAH Veracruz. INAH. Diciembre 2010 •2010-2013 Programa Emergente de atención a inspecciones en el área del Proyecto Aceite Terciario del Golfo. INAH-PEMEX PEP Región Norte. Activo Aceite Terciario del Golfo. •2012 Salvamento Arqueológico La Pureza-Coca Cola. INAH-FEMSA. Tuxpan, Ver. •2012 Proyecto de Supervisión del Estudio Sismológico Tres Hermanos 3D Norte. INAH-COMESA. Naranjos, Ver. • 2012 Proyecto Mantenimiento menor del sitio arqueológico Cebadilla. Programa de Empleo Temporal INAH-SEDESOL-Municipio de Ozuluama. Ozuluama, Ver. • 2012-2013 Proyecto de Salvamento Tabuco–APITUX 2012. INAH-APITUX. Tuxpan, Ver. • 2013-2014 Proyecto de Supervisión del Estudio Sismológico Limonaria 3DHD. INAH-COMESA. Ozuluama, Ver. • 2015-2016 Proyecto de Salvamento Arqueológico Autopista Tuxpan-Tampico. INAH-SCT. Tuxpan-Naranjos-Ozuluama, Ver. • 2017 Salvamento Banco de Basalto Cerro Azul. Cerro Azul, Ver. • 2018 Supervisión Arqueológica del Proyecto Sismológico La Laja 3D. Ozuluama, Ver. • 2018-2019 Proyecto de Salvamento Arqueológico Tabuco Gas Natural del Noroeste. INAH-INVEX. Tuxpan; Veracruz. • 2020 Directora del Salvamento Arqueológico Parque Infantil Castillo de Teyo. Castillo de Teayo, Ver. • Se han realizado más de una decena de artículos derivados de la investigación arqueológica en Hidalgo, Querétaro y Veracruz, tanto en el centro como en el norte principalmente. • Se han realizado medio centenar de ponencias desde 1995 en eventos académicos y de divulgación a público no especializado •Se han dado más de una docena de conferencias en eventos académicos y de divulgación • Se ha asesorado y/o leído a media docena de tesistas de licenciatura, maestría y doctorado con temáticas relacionadas especialmente con las culturas del norte de Veracruz • Se ha colaborado ocasionalmente como dictaminadora de artículos en publicaciones nacionales y extranjeras