Durante el año pasado y en este 2020, hubo reportes de personas (principalmente pescadores) que decían haber vistos manatíes tanto en la Laguna de Tamiahua como en los esteros del Río Tuxpan. ¿Pero qué es un manatí? El manatí es un mamífero (alimenta a sus crías con leche por medio de glándulas mamarias) acuático cuyo nombre científico es Trichechus manatus.
Son animales de color gris claro y en ocasiones con tonos de color café claro. Miden aproximadamente entre 3 y 4 metros, llegando a pesar entre 200 y hasta 400 kilogramos. Su cola esta aplanada de forma horizontal, lo que hace que la cola parezca una espátula. Su reproducción es extremadamente lenta, las hembras dan a luz a una sola cría cada 3 a 5 años. Al nacer, la cría mide aproximadamente un metro y pesa 35 kilogramos. Las crías permanecen con su madre por lo menos durante dos años, en ocasiones permanecen por más tiempo.
Existen principalmente tres especies de manatíes: 1) el manatí antillano (Trichechus manatus); 2) el manatí amazónico (Trichechus inunguis); y 3) el manatí africano (Trichechus senegalensis). La especie que se encuentra en México es la del manatí antillano. Esta especie de manatí habita desde el norte de Florida hasta el norte de Brasil. Usualmente viven en cuerpos de aguas salobres (esteros, lagunas costeras, desembocaduras de ríos al mar, etc.) y ocasionalmente se les puede ver en el mar. Cuando están en el mar, suele ser porque se están moviendo de un cuerpo de agua salobre a otro.
Mapa que muestra el área de distribución del manatí antillano, desde la Florida hasta Brasil.
Son organismos muy pacíficos y son herbívoros. Esto quiere decir que se alimentan exclusivamente de plantas. Comen una gran variedad de plantas y los animales adultos llegan a comer hasta el equivalente al 10% de su peso al día. ¡Un solo manatí puede comer 40 kilogramos de plantas!
En la actualidad se considera como un animal que está en peligro de extinción. Esto se debe a que desde el siglo XVI hasta mediados del siglo XX fue objeto de una cacería intensiva, lo cual ocasionó que sus poblaciones declinaran drásticamente. Existían pescadores dedicados a la búsqueda y caza de manatíes, a quienes se les llamaba manaticeros. Cada una de estas personas, llegaban a matar más de una decena de individuos por temporada de caza. En la actualidad su caza se encuentra totalmente prohibida, pero estos gentiles gigantes del agua siguen amenazados por que su hábitat está siendo destruido por algunas actividades humanas. ¿Qué debes de hacer si ves un manatí? Lo primero es recordar que son animales muy pacíficos, después debes de disfrutar el espectáculo y finalmente lo debes de reportar a la dirección de ecología de tu municipio o a la SEMARNAT.
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